que nacen, crecen y se desvanecen,
que se alegran y se alejan,
que flotan en el aire.
Inmensidad de un suspiro.
Inmensidad de un estribillo.
Sórdido y seco resquicio,
segregación incorrupta de lo prohibido:
cruel despertar de un hastío.
Palabras de papel,
fugaces manos capaces,
que se alzan, caen y entorpecen,
que juegan a ser amas del derroche,
que estropean y desean feliz noche.
12 Abril 2009
No hay comentarios:
Publicar un comentario