Debía de ser el único que no sabía quien era ella. Tan impersonal pero bella a su manera.
No destacaba a simple vista pero tenía algo oculto, tal vez una manera diferente de mirar a los ojos o de expresarse o evitar hacerlo.
Todos saben que no es corriente y muchas chicas la odian a muerte por ello a la vez que interiormente la envidian por ser quien es. Se reiran de sus desdichas cuando esté sola despues de regalar sus besos a unas palabras amables en un momento inoportuno. Cuando llore por no sentirse amada como recuerda en su juventud.
Y cantara al viento mientras el revuelve el pelo y tiñe de frio su blanca piel. Cantara como nadie jamás deseo hacerlo, con lágrimas o con rabia, con dolor o con superación por sobrevivir a un día más de su vida inestable.
Si su voz le falla mostrara una sonrisa pícara o distraída, si su determinación se hunde escribira en su lugar favorito algun gusto prohibido o incomprendido por los demás mortales. Les maldecirá por ser como son, mientras se guarda un as en la manga, para un día como esos, un día gris pero con solución si sabe tomarla a tiempo.
Y mientras las demás la maldicen a sus espaldas, ella sonreirá una vez más, olvidando la soledad que se trasluce inoportuna, esperando un desenlace desconocido, no estable, pero más duradero.
Un paso para soportar el hastío.
14 Febrero 2009
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